lunes, 8 de enero de 2018

Cuando los médicos eran enemigos de la higiene

En la naturaleza es posible encontrar individuos de diversas especies excepcionalmente blancos. El fenómeno puede obedecer a tres trastornos: albinismo, leucismo o isabelinismo. Los albinos, como le sucedió al gorila Copito de Nieve, no pueden producir ningún tipo de pigmento, por lo que tienen una coloración blanca. Los animales leucísticos son predominantemente blancos pero pueden producir algunos pigmentos. Por último, está el isabelinismo, una mutación genética que diluye el pigmento en las plumas de los pingüinos.
El isabelinismo es un terrible problema para los pingüinos papúa que habitan en la península Antártica, ya que pone en peligro su supervivencia. El camuflaje negro de la espalda de los pingüinos les protege de los depredadores que nadan por encima, un efecto que desaparece con la mutación.
El término isabelinismo entronca con la historia de nuestro país, concretamente con Isabel Clara Eugenia de Austria (1566-1633), la hija de Felipe II. Tras su boda con el archiduque Alberto de Austria, primo hermano de Isabel, su padre la otorgó como dote los Países Bajos y el ducado de Borgoña.


La misma camisa hasta la toma de Ostende


La infanta fue testigo como los Países Bajos se alzaron en armas contra la corona española en respuesta a las severas cargas económicas a las que les sometía el imperio y a las exigencias religiosas católicas. Este descontento cristalizó en la Guerra de los Ochenta Años o Guerra de Flandes. Fue precisamente en ese contexto cuando se produjo el sitio de la ciudad de Ostende (Bélgica) y cuando Isabel pronunció la famosa frase: “prometo no cambiarme de camisa hasta que se tome Ostende”. El asedio se prolongó más de lo esperado y los tercios del imperio del español no conquistaron la ciudad hasta tres años después (1601-1604). Fue uno de los asedios más largos y cruentos de la historia que se saldó con más de 100.000 fallecidos.
¡Tres años estuvo Isabel sin lavarse! Bueno, eso es lo que dice la leyenda. De ser cierto el color de sus ropajes habrían dejado de ser de color blanco y se habrían tornado en un blanco cremoso, el inconfundible “isabelino”.

Los prejuicios contra la higiene

La verdad es que en el siglo XVII la higiene brillaba por su ausencia. Las ciudades carecían de los más rudimentarios sistemas de alcantarillado y canalización, y las calles y plazas eran auténticos albañales por los cuales discurrían las aguas residuales.
Los ciudadanos tampoco eran un dechado de limpieza, se lavaban poco y lo hacían en “seco”, evitando el uso del agua. Lo peor es que lo hacían por prescripción facultativa. Todavía perduraban las ideas médicas gestadas por Hipócrates y Galeno en el mundo helenístico, el llamado “hipocratismo galenizado”. Así, estaba muy extendida la creencia de que la salud dependía básicamente del equilibrio entre los cuatro humores que integraban el cuerpo humano (sangre, bilis amarilla, bilis negra y flema). Los malos humores se evacuaban mediante procesos naturales –hemorragias y vómitos- y el agua favorecía que se abrieran los poros de la piel y que a través de ellos entrasen los miasmas en el interior de nuestro cuerpo, favoreciesen la aparición de las enfermedades.
No en balde don Quijote tan sólo se asea tres veces en toda la novela: la primera cuando llega a la casa del Caballero del Verde Gabán, la segunda cuando llega al palacio de los duques y, por última vez, tras ser sacudido por un rebaño de toros y vacas.
En contra partida, también existían reglas de decoro personal en el Siglo de Oro español, como las que recomendó don Quijote a Sancho Panza cuando fue nombrado gobernador de la ínsula de Barataria: “lo primero que te encargo es que seas limpio y te cortes las uñas, sin dejarlas crecer como algunos hacen, a quien su ignorancia les ha dado a entender que las uñas les hermosean las manos”.


Fuente: ABC

Twitter justifica por qué no bloquea a líderes mundiales

Ante las crecientes críticas por el uso de algunos líderes políticos de las redes sociales para difundir mensajes tendenciosos o directamente falsos, Twitter emitió este viernes un comunicado para justificar su decisión de no ejercer ningún tipo de censura al respecto. "Bloquear a un líder mundial en Twitter o eliminar sus controvertidos tuits apenas ocultaría una información importante que la gente debe poder ver y debatir.

 Además, tampoco serviría para silenciar a dicho líder y, sin embargo, dificultaría la discusión necesaria en torno a sus palabras y sus actos", explicó la empresa en un comunicado.



Esta declaración de intenciones se produce después de que en los últimos meses numerosos usuarios hayan criticado a esta red social por no establecer un filtro con el fin de evitar los abusos cometidos por algunas figuras públicas que emplean estos breves mensajes de 280 caracteres para transmitir mensajes que de otra manera no encontrarían una plataforma. Uno de los casos más destacados es, sin lugar a dudas, el del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien no duda en acudir a su perfil personal de Twitter para criticar a los medios de comunicación, difundir dudosos datos sobre su Gobierno e, incluso, para amenazar e insultar a otros líderes mundiales. 

De hecho, el propio Trump se convirtió en uno de los principales causantes esta polémica después de que el 29 de noviembre del año pasado decidiera retuitear una serie de vídeos del partido minoritario de ultraderecha Britain First. Los vídeos en cuestión habían sido tuiteados por la política Jayda Fransen, integrante de ese partido, y llevaban por título "Emigrante musulmán golpea a niño holandés en muletas", "Musulmán destruye estatua de la Vírgen María" y "Pandilla musulmana lanza a adolescente desde un tejado y le da una paliza de muerte". 

Esta acción de Trump generó una oleada de reacciones por parte de numerosos ciudadanos que exigieron a Twitter que eliminara dichos mensajes y que bloqueara la cuenta del mandatario, tal y como hace con otros usuarios que utilizan esta red social para difundir mensajes de contenido racista, sexual o de odio. 

La compañía, que ha reconocido "revisar" los mensajes de los líderes mundiales, ha señalado que en estos casos ha de tenerse en cuenta "el contexto" que los define y ha negado que su decisión de no adoptar medidas al respecto se deba a su interés por generar un mayor tráfico en las redes.

FUENTE: 20minutos

Whatsapp batió en Nochevieja su récord mundial con 75.000 millones de mensajes

El servicio de mensajería instantánea Whatsapp batió la pasada Nochevieja su récord al registrar 75.000 millones de mensajes en todo el mundo, informó este miércoles el medio especializado VentureBeat citando fuentes de la compañía tecnológica. 

Esta marca, que superó su anterior récord de 63.000 millones de mensajes en la Nochevieja de 2016, fue establecida por Whatsapp pese a que sufrió el 31 de diciembre un fallo técnico que dejó a gran parte de sus usuarios en diferentes partes del planeta sin servicio durante aproximadamente una hora. 

Un portavoz de Whatsapp detalló que dentro de los 75.000 millones de mensajes que marcaron el nuevo récord se incluyen 13.000 millones de imágenes y 5.000 millones de vídeos. Whatsapp, que fue adquirida por la red social Facebook en 2014, tiene más de mil millones de usuarios registrados en más de 180 países, según los datos facilitados por la compañía en su página web.

Fuente: 20minutos



La mentira de la fórmula matemática para ganar el Gordo de la lotería

Una administración de Murcia asegura que ha repartido el primer premio gracias a un algoritmo


“¿Para qué vas a andar buscando números por diferentes administraciones por si te traen la suerte? En nuestra administración te aseguramos que vamos a dar cinco premios en la Lotería de Navidad. Por eso te recomendamos que no busques más porque la suerte está aquí, en nuestra administración. ¡Somos los únicos que te aseguramos que vamos a dar cinco premios!”, anunciaba el 28 de septiembre la administración de lotería Perolo, en San Pedro del Pinatar (Murcia). Hoy han repartido el Gordo —el número 71198—, el segundo y dos quintos. En total, cuatro premios.
La administración afirma que existe una “fórmula matemática” con la que sus “expertos calculan que un número tenga mayor probabilidad de ser premiado”. Según el discurso de Miguel Ángel Zapata, gerente de Perolo, descartan los números que ya han sido premiados en otros años y las terminaciones del sorteo anterior, porque supuestamente tendrían menos probabilidades de aparecer de nuevo en la boca del bombo.
“La única forma de aumentar la probabilidad de que te toque la lotería es comprar más números", zanja el matemático David Ríos
El investigador David Ríos, del Instituto de Ciencias Matemáticas (ICMAT), sonríe al leer la propaganda de la administración. ¿Existe una fórmula matemática para aumentar la probabilidad de ganar el Gordo? “No, que un número salga un año no hace menos probable que salga el siguiente”, zanja.
Ríos dirige la Cátedra Permanente en Análisis de Riesgos Adversarios, creada en Madrid con 1,1 millones de euros del fondo para la investigación de AXA, uno de los mayores grupos aseguradores del mundo. Ríos sabe de lo que habla, pero ni siquiera hace falta. Cualquier persona con sentido común sabe que si tiras un dado que no esté trucado existe la misma probabilidad de que salga un 1 que un 3 o un 6. En el sorteo de la lotería de navidad de 2018, la probabilidad de que el Gordo sea de nuevo el número 71198 será la misma que este año: una entre 100.000, o sea 0,00001. Y lo mismo ocurrirá en 2019 o en cualquier otro año.
“Hemos querido mejorar la fórmula para resolver la cuestión de que hay terminaciones que han salido más veces que otras y para ello hemos aplicado el principio de estadística de la distribución binomial de probabilidad, y sigue sin salirnos el número 13, que es el que coincide con la terminación del Gordo del año pasado”, aseveraba la administración el 18 de agosto.
Es un absoluto sinsentido, aclara Ríos. “La única forma de aumentar la probabilidad de que te toque la lotería es comprar más números, que es lo que está ocurriendo con esta publicidad. Es lo mismo que ocurre en La Bruixa d'Or o en Doña Manolita”, explica Ríos. Estas dos administraciones de Lotería, líderes en la venta de décimos en España, también han vuelto a repartir este año el Gordo. Es la lógica del famoso chiste: se está rifando una torta y tienes todas las papeletas.
Fuente: EL PAÍS

Números normales

Para los matemáticos, todos los números son interesantes, pero no todos son “normales”

Si os fijáis en la fecha del enlace de El juego de la ciencia de la semana pasada, comprenderéis el tono un tanto jocoso y burlón de los acertijos planteados.
El que da título al artículo, “Piensa un número”, es un clásico popular y resulta más divertido si se plantea oralmente. La suma de las cifras de cualquier número del 1 al 10 multiplicada por 9 da 9, y al restarle 5 nos remite a la 4ª letra del alfabeto. Hay muy pocos países que empiezan por D y muy pocos animales cuyo nombre empieza por i, por lo que la inmensa mayoría de las “victimas” de este falso ejercicio adivinatorio piensan en la iguana.



Números normales


Nadie ha resuelto el jeroglífico OOOOoO, cuya solución es “Nadaré donde la Rosarito nada” (nada redondel aros arito nada).
En cuanto al número de vacas, viene dado por el número de palabras de la pregunta que sigue a cada concierto de mugidos, por lo que la respuesta es dos.
¿Hay número no interesantes? Si los hubiera, el menor de ellos tendría el interés de ser el más pequeño de los números no interesantes, por lo que habría que incluirlo en el grupo de los interesantes y otro pasaría a ser el menor de los no interesantes… Y así sucesiva e indefinidamente.
¡Qué tiene de especial el número 2018? Manuel Amorós define los “números atractivos” como aquellos n tales que n/2 y n-1 son primos, y 2018 es uno de ellos, pues tanto 1009 como 2017 son primos. Y plantea la siguiente pregunta: ¿hay infinitos números atractivos?
Y Lorem Ipsum señala que 2018 = 10 x 9 x 8 x 7 : 6 : 5 x 4 x 3 + 2 x 1. ¿Se te ocurren otras formas curiosas de expresar el número 2018?

Normales y anormales

Por lo demás, el 2018 no tiene nada de especial, por lo que podríamos decir que es un número muy normal. Pero solo en sentido coloquial, pues en matemáticas se denomina número normal a aquel número real cuyos dígitos presentan una distribución uniforme, es decir, todos los dígitos son igualmente probables, todas las parejas de dígitos son igualmente probables, todas las ternas son igualmente probables, etc.
Esta distribución “equitativa” hace que en un número normal podamos encontrar cualquier secuencia numérica; dicho de otro modo: dado un número natural cualquiera, lo encontraremos en algún lugar del desarrollo decimal de un número normal. Esto significa, obviamente, que los números normales son irracionales, puesto que en los racionales hay pautas que se repiten indefinidamente y que, por tanto, no permiten que aparezcan todas las secuencias posibles.
Si la condición anterior (encontrar cualquier secuencia numérica en su desarrollo decimal) no solo fuera necesaria sino también suficiente, ¿cómo se podría construir fácilmente un número normal?
Todos los números normales son irracionales, pero no todos los irracionales son normales (aunque sí la mayoría). Se cree que π es normal, pero no se ha podido demostrar. ¿Puedes hallar un número irracional “anormal”, sagaz lector(a)?
Y para no abandonar del todo el espíritu festivo: ¿se te ocurre algún argumento extramatemático e inmediato a favor de la existencia de números anormales?
Fuentes: El País